viernes, 22 de junio de 2018

CÁLIDO MARFIL


Egoísta te creé por mi simple vanidad,
Al  final la vanidad no es más que dolo. 
El individuo no es para estar solo,   
La naturaleza  me exige comunidad,   

Amolde mis deseos en cálido marfil,
Como alguna vez el soberbio  dédalo,
Te mire desde aquel  pedestal infantil,            
Me juzgaste por mi cinismo anómalo.   
               
Tener compañía parecía tan vital,         
Desde tu pedestal con tu corazón  estil,   
El espejismo  artero se percibía real.   

Ascendiste como sol de manera sutil,   
No te alcance mas, era yo muy terrenal,
Te dejó en libertad Adonis de marfil.